Una de las frases más hermosas de la Biblia es la que cita: “... no hay amor más grande que el que da su vida por sus amigos” Juan 15-13
Como Director Regional creo fielmente en la Conmemoración de esta fecha, a pesar de representar dolor y luto para nuestra provincia y para Costa Rica entera.
Dar la vida, debe ser fácil si el otro es un hijo, una madre, padre, hermano, esposa, esposo pero…darla por otros que yo no conozco, ese es un acto de valentía… un acto de amor, no se puede llamar de otra manera.
El 13 de setiembre de 1975 es una fecha que a través de Antonio José Obando Chan, Arturo Mendoza y otros ciudadanos nos invita a reflexionar acerca de lo frágiles que somos en este mundo, tener en cuenta que la vida de un ser humano se puede ir en cuestión de segundos, lamentándonos después de no haber expresado lo importante que han sido en nuestras vidas.
Puntarenas nunca olvidará la Tragedia de la Angostura, nunca olvidará la entrega y sacrificio de muchos por rescatar a mujeres, niños, adultos mayores que debieron pasar momentos muy duros; las imágenes de la época hablan por sí solas, la herida al menos para mí, aún duele.
Sin embargo, el escuchar testimonios de sobrevivientes hace que aplaudamos la heroica hazaña y el triste acontecimiento.
El Ministerio de Educación Pública tiene el hermoso deber de inspirar a los niños para hacer Patria, pero este concepto resulta muy abstracto para ellos, necesitamos de figuras reales que nos ayuden a ejemplificar el amor, la solidaridad, el respeto, el sacrificio por el bien común, alejándonos de promover ideas egoístas e individualistas que lastimosamente prevalecen hoy día.
Antonio José Obando Chan fue declarado Héroe Nacional, ¿Qué creen ustedes que respondería un niño o niña ante la pregunta:
¿Quién es un héroe?
En su imaginario, pueden ser figuras irreales o futuristas de robots o Transformers, es nuestra responsabilidad en el aula reconocer que existieron, existen y existirán héroes de carne y hueso como lo fue este muchacho de tan solo 15 años de edad.
No son ficticios, los conocemos en fotografías, bustos, esculturas y a través de reflexiones como ésta.
Al pensar en los tipos de personajes que se apoderan de las mentes de nuestros estudiantes a través del internet y sus “avances”, estereotipos que calan en su memoria, “héroes” que hoy alcanzan ese título por matar o destruir imperios.
Ante esto, cada centro educativo debe promover con mayor ahínco las virtudes de héroes nacionales y regionales que nos heredan valores trascendentales para formar y fortalecer identidades.
Aunado a esto estamos ante programas que promueven habilidades como el pensamiento crítico, sistémico, dilemas morales, pero sobre todo las emociones que son parte del ser, es necesario considerar los sentimientos, los propios y los ajenos, trabajar por el bien de la mayoría, sacrificarse por los sueños, trabajar por estos, establecer alianzas con los amigos con los buenos amigos, los que nos ayudan a no ahogarnos en el mar de la drogadicción, pereza y apatía.
Gracias a muchos que como don Arturo Mendoza rescataron a hermanos puntarenenses, gracias Antonio José porque siendo un niño te inmortalizaste en la memoria colectiva de este país.
Con todo respeto les invito a trabajar con los estudiantes las características que hicieron del joven Obando Chan un héroe y ¿por qué no? contraponerlo con esos “héroes” creados para distraernos de lo realmente valioso: la solidaridad, la entrega, el amor.
Que Dios nos bendiga. Una oración por aquellas personas que perdieron su vida hace 44 años y nuestra gratitud a quienes murieron por salvar a muchos otros, un abrazo a sus familiares.
Gracias jovencito estás aquí en cada corazón que aún late y en las generaciones perpetuarás tu hazaña.
Gracias a todos y bendiciones hoy y siempre.